martes, 16 de marzo de 2021

El escenario en torno al Mar Mediterráneo (s. XIV):


En Europa hacia inicios del siglo XV, las nacionalidades no estaban claramente definidas, aunque había ciertas diferencias entre castellanos y portugueses, aragoneses y genoveses. Era de mayor importancia, las identificaciones culturales que tenían los pueblos en torno a las creencias religiosas. Es así que, a inicios del siglo XV, nos encontramos con cristianos, musulmanes y judíos.
En torno al Mar Mediterráneo, , las culturas que existían desde la Edad Media eran:
* El Imperio Bizantino: Su capital era Constantinopla; había perdido territorios que tenía dominados en los siglos anteriores. Sus enemigos más poderosos, los turcos (uno de los pueblos musulmanes) lograron vencerlos en 1453 (fecha en la que finalmente ocuparon su capital).
* Los musulmanes: a diferencia del Imperio Bizantino, estaban en plena expansión. La principal actividad económica que practicaban los musulmanes era el comercio, lo que le permitió tener contactos con otras culturas. De esta manera, llegaron a Europa provenientes del Lejano o del Medio Oriente técnicas de cultivo (por ejemplo, el sistema de regadío), productos agrícolas (arroz y árboles frutales), invenciones técnicas (la brújula, la pólvora y el astrolabio),  y nuevos conocimientos (por ejemplo el álgebra).
* En Europa: aunque no existía una unidad política, todo el territorio se encontraba unificado por la religión (los europeos eran mayoritariamente cristianos). La autoridad religiosa del Papa, desde Roma, ejercía muchas veces también su poder político. En los territorios europeos solía haber intercambios comerciales, culturales y científicos entre cristianos y musulmanes; aunque también estallaban guerras entre ellos. Los cristianos organizaron Las Cruzadas para recuperar los Santos lugares de Tierra Santa de mano de los infieles (forma en la que llamaban a los musulmanes). Estas Cruzadas permitieron a los europeos -a su vez- mayores intercambios comerciales y el conocimiento del mundo griego y hebreo.